El lunes salí a trotar 20 minutos... un ritmo lento y un pulso más bien alto, pero después de tanto tiempo sin correr era lo esperado. Estoy contenta, me hubiera ido a nadar en bici, pero poco a poco.
El martes cuando me doy cuenta ya he desayunado, preparado la maleta de la natación y vestida. Jesús también va a la piscina, pero él en coche... Sigo en mis treces de ir con mi bici de montaña! Unos 4 o 5 km que me activan antes de tirarme a la piscina.
En el agua la cosa no marcha tan bien, la tendinitis del hombro no se ha curado, y al hacer ejercicios de piernas con la tabla me vuelve a dar la cara el psoas... No llego a 500m y me tengo que salir del agua (no se cómo lo hice en Lisboa... Sería la adrenalina de estar en competición). Un buen estiramiento y a la ducha!
Para la vuelta a casa tengo la opción de volverme con Jesús en coche, pero estoy un poco tristona y prefiero volverme en mi bici y disfrutar de esos 15min de pedaleo! Lo curioso es que, ahora porque voy dolorida, pero en la bici no me molesta el psoas ni nada... Pues nada, bici y carrera, y el día que me toca piscina a estirar y recuperar mi hombro!

La ruta termina como se merece... Con un par de cervecitas para brindar "Salou" por nuestro compi. A la celebración se une Pilar, una divertidísima futura compañera de maratones. Ella no lo sabe, pero el aceptar tomar unas cervezas con 3 camaleones es el primer paso para cambiar el pilates por el triatlón! ;)
Termino la semana muy contenta y motivada. Ricardo me ha propuesto un nuevo reto... La Media Maratón de Dos Hermanas en noviembre! En agosto, con la fresquita, empezamos el entreno serio...
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